Videojuegos
Escritura interactiva
Mi escritura
Microhistorias
Pensamientos desatados y notas románticas
Videojuegos
Muestras cortas con mecánicas de juego:
Juego: Uprooted.
Contexto:
Sprout es el personaje principal del juego llamado Uprooted. Es un hongo parásito que por naturaleza zoombifica a las hormigas carpinteras. Acaba siendo alterado biológicamente para el videojuego.
Sprout (la pequeña quimera) es un espécimen que un científico ha estado estudiando y modificando para cumplir un objetivo muy especial para la Tierra.
La principal línea de investigación se basaba en acelerar el proceso para matar y controlar a una hormiga carpintera, pero el científico fue un paso más allá y pretende abarcar miles de especies, empezando por los insectos… y terminando por los humanos.
El propósito del científico es utilizar las estrategias de un ecologista que busca equilibrar el medio ambiente exterminando parte de las especies invasoras.
>Una estrategia de ataque sería a través de Sprout generando nubes a través de sus esporas.
>Como estrategia defensiva tiene la opción de usar un insecto más al final (montándolo) para pasar los obstáculos de una manera más fácil o de una manera que el Sol no pueda hacerle daño ya que el cuerpo del insecto le sirve como una especie de armadura.
Link of the project.
Escritura interactiva
Muestras:
Juego: Uprooted.
Contexto:
La Voz es un antagonista.
Sprout conocerá su objetivo desde el principio porque su modificación biológica tuvo éxito, y al retarse a sí mismo cada vez a controlar nuevas especies, será vulnerable al escuchar constantemente a La Voz, dependiendo de lo que elija el jugador.
El jugador podrá ver en gráficos la mente del científico con atisbos de un mundo mejor a través de su investigación, y luego saldrán pequeños clips de lo que Sprout está haciendo realmente en el juego.
El jugador hace que Sprout camine un poco, aparece un insecto (habrá algo que incite al jugador a hacer clic)
Sprout se mete inmediatamente en el insecto y lo zombifica (el escenario se detiene un momento sin poder avanzar para que el jugador aprenda a usar un poco el insecto)
Link of the project.
Mi escritura
>El cielo oscuro acecha como buitres al sonido de la muerte.
La muerte real que surge separando cuerpos a cada segundo, en el cuerpo de raíces putrefactas, en el lecho que de pronto sostiene un montón de venas exprimidas. La avidez de un rojo que se coagula por un rojo fresco. El rojo que llega a través de la vida.
Como un sonido hueco e incesante resultan las agujas en la carne más sana.
Las teclas están dañadas y con un toque las cuerdas se deshacen poco a poco; la entonación es un desastre y el que puede reparar el daño no tiene aptitudes para la música.
La melodía del viento mantiene invisibles a los lunáticos que bailan en las orillas de mares y ríos. La caída de la montaña peligrosa azota la bolsa de sangre coagulada.
Tengo que sacarla de mi pecho, en mis manos y acariciarla como si fuera nueva. Como si amara igual que antes; como si no estuviera lista para ser desechada.
>Sus piececitos estaban forrados para el invierno, la niña siempre iba vestida de flores y el propósito de sus mañanas era saludar a su mejor amigo, el árbol parecía esperar ansioso, a veces la niña juraba que el viento le soplaba sus mensajes… Y así fue.
Todos los días la niña tocaba cualquier hoja del sauce plateado y le hablaba en voz alta.
Al día siguiente, la hoja que había tocado atravesaba una puerta de hiedra y aterrizaba misteriosamente siempre sobre su cama.
Ella guardaba cada una de ellas, pero llegaba el otoño y el árbol se dormía… Se despertaría a su debido tiempo.
Pero un año no lo hizo.
Y los mensajes de las hojas se revelaron uno a uno.
Microhistorias
-Dicen que cuando deja de llover durante mucho tiempo es porque las criaturas de los bosques han partido hacia destinos inimaginables, la locura los consume en algún momento por absorber la tristeza del cielo. Deben vivir cada gota, lo que significa cada razón, cada experiencia que el cielo termina viviendo a costa de observar todo lo que hacen los humanos. El cielo suele enviar mensajes que sólo esas criaturas pueden descubrir, sin embargo, después de cierto tiempo se dice que esos seres ancestrales escapan a la posibilidad de conocer las razones que tiene la tierra para hacer llorar al cielo.
-Un árbol milenario con raíces gigantescas.
El aire deslizaba las hojas secas para formar un manto y dividir los tipos en colores y formas. De pronto dos cristales verdes deslumbraron en un hueco sobre las raíces, parecieron acercarse a la superficie, a un lado de las hojas y de pronto se convirtieron en un par de ojos fijos, verdes y revoloteando afuera. Los cuervos exclamaron y cada nota alzada por tan pequeños pájaros fue creando un ser misterioso. En aquel bosque no existían ni el verano ni el invierno. El tiempo consistía simplemente en dos estaciones, pues la paz terminaba cuando el reloj daba demasiadas vueltas.
—¿Has oído eso?…—me dije susurrando en mi mente. … —Vamos, sal de ahí—Hablé por fin en voz alta—No debes temer, hace días que no hay una sola estrella en el cielo así que creo saber quién eres, aunque puedes venir a explicarme la razón.
-Érase una vez un lugar llamado: La Bahía de los Inventos. La costumbre de pedir un deseo en ese lugar estaba inevitablemente ligada a cada poblador que lo descubría.
Los árboles de Sangre de Dragón han contado cada equinoccio de la Tierra desde las creaciones más extravagantes hasta las más poderosas o insustanciales. Desde la invención más famélica en esencia hasta la supremacía más insaciable. Una vez, hace cientos de años alguien o algo deseó cantidades exorbitantes de piel humana, como consecuencia… Descubrió millones de espíritus esperándole en un contenedor. Le seguirían durante el resto de su existencia. Sin preámbulos tal deseo había aterrizado con la ayuda del reflejo de una estrella, logrando su propósito. Era el momento de afinarlos… Ahora era posible terminar el nuevo instrumento. Había encontrado la última especie de las galaxias de la Tierra para representar el infinito en una canción.
-En las montañas más lejanas existe el secreto de que en Octubre la Luna envía un mensaje a través de la niebla a los árboles otoñales que cuando terminan de secarse conceden un deseo a aquellos que tienen la suerte de encontrar una de sus hojas… En un intento desesperado por evitar que se seque un corazón más.
Pensamientos desatados y notas románticas